Homilía solemnidad de Cristo Rey
La siguiente es la homilía de nuestro párroco en la solemnidad de Jesucristo Rey del Universo.
¿No eres tú el Mesías? Es la pregunta ante un Dios que se da a conocer en la extrema fragilidad de un crucificado. Ahí, en la carne de un condenado sin futuro se daba a conocer, en toda su grandeza, el amor extremo de Dios. Pero, ¿es el Mesías que queremos?
Esta es la imagen de Cristo Rey. De un Dios que reina dándose enteramente. Entregado y partido para nuestra vida. Así reina el Señor, en toda vida, que asociada a la suya se entrega sin límite.
La fiesta de Cristo Rey, que cierra el año litúrgico, nos centra en la eucaristía, memorial de su Pascua. Y este reinar nos invita a entrar en un nuevo ciclo litúrgico para renovar la aceptación de su reino. Así, para todos los crucificados con Él, se abre una nueva oportunidad de experimentar aquel «hoy estarás conmigo en el paraíso».
Evangelio (Lucas 23, 35-43)
Después que Jesús fue crucificado, el pueblo permanecía allí y miraba. Sus jefes, burlándose, decían: “Ha salvado a otros: ¡que se salve a sí mismo, sí es el Mesías de Dios, el Elegido!”
También los soldados se burlaban de Él y, acercándose para ofrecerle vinagre, le decían: “Si eres el rey de los judíos, ¡sálvate a ti mismo!”
Sobre su cabeza había una inscripción: “Este es el rey de los judíos”.
Uno de los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo: “¿No eres Tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros”. Pero el otro lo increpaba, diciéndole: “¿No tienes temor de Dios, tú que sufres la misma pena que Él? Nosotros la sufrimos justamente, porque pagamos nuestras culpas, pero Él no ha hecho nada malo”. Y decía: “Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu Reino”.
Él le respondió: “Yo te aseguro que hoy estarás conmigo en el Paraíso”.
